Quito (PL) Lenín Moreno, del gubernamental Movimiento Alianza PAIS, es el presidente de Ecuador, electo en las urnas por mayoría del voto popular y ratificado por reconteo de más de 300 mil sufragios.
La segunda ronda de comicios realizada el pasado 2 de abril certificó la victoria del exvicepresidente, con 51,15 por ciento, frente al 48,85 obtenido por su rival, el exbanquero y líder de la coalición CREO-SUMA, Guillermo Lasso, quien lo secundó luego de las justas iniciales, sostenida entre dichos candidatos el 19 de febrero.
Como en la primera ocasión, Moreno volvió a imponerse en unas elecciones controvertidas debido a la postura de desconocimiento de resultados por parte de la derecha y a todas las tramas desarrolladas para desligitimar al gobierno y desacreditar al poder electoral.
De todo hicieron los opositores para intentar impedir la continuidad de la revolución ciudadana, representada por Lenín, como se le conoce, y su compañero de fórmula, el actual vicemandatario, quien logró retener el cargo para el próximo período 2017-2021.
Las elecciones más ideologizadas en la historia de la nación: así definió el jefe de estado saliente, Rafael Correa, al proceso comicial que se vivió en todo el territorio nacional, principalmente desde febrero hasta el balotaje.
Según los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral (CNE), Moreno logró acumular cinco millones 60 mil 424 votos, mientras que Lasso, que muchos vinculan con la etapa nefasta del feriado bancario en 1999, alcanzó cuatro millones 833 mil 828 sufragios.
LA VICTORIA DE ALIANZA PAÍS Y SU BINOMIO
Un programa basado en el Plan Toda una Vida, que incluye cinco ejes para dar cobertura a todos los sectores de la sociedad con bonos y viviendas, fue la propuesta del representante oficialista, quien prevé, basado en los logros de los últimos 10 años, impulsar mejor bienestar para todos los ecuatorianos, en especial para los más desposeídos.
El objetivo estaba bien claro: «liderar un gobierno responsable que se preocupe de los ciudadanos toda la vida, desde el nacimiento hasta la vejez».
Con esa arma y la Misión Manuela Espejo, de localización, asistencia y seguimiento a las personas con discapacidad, que salieron de la exclusión, Lenín Moreno obtuvo una diferencia de 226 mil 596 papeletas sobre Lasso.
¿La clave del triunfo? Ser consecuente con su programa, bien concebido y con proyectos argumentados para implementarlo, así como contar con el respaldo de numerosas organizaciones sociales en el nivel nacional, que representan mujeres, estudiantes, jóvenes, emprendedores, campesinos y las bases indígenas.
Desmontar cada una de las farsas generadas por los contrarios para desacreditar a los líderes de Alianza PAIS, fue otro factor que ayudó, pese a que en un inicio sembró algunas dudas entre algunos.
A LA OPOSICION NO LE DA LA CUENTA, NI CON RECONTEO
Desde enero último, cuando comenzó la campaña electoral de cara a la primera vuelta, la oposición ecuatoriana, entonces representada por siete partidos, se empeñó en criticar al ejecutivo, en vez de exponer y defender con sustentos sus planes.
Su falta de propuestas concretas para mejorar la vida de los ciudadanos, la llevó a la doble derrota en las urnas, en primera y segunda vueltas.
No sirvieron sus intentos de sembrar la teoría del fraude, ni las peticiones de recontar actas, supuestamente por irregularidades que afectaran los votos del exbanquero.
Cada uno de esos intentos, llevó solo a la revalidación de su fracaso y la relegitimación del vencedor, que acumuló más puntos en vez de perderlos, como suponía la derecha, cuando acudieron al recurso de la objeción, instituido en las normativas electorales.
IMPEDIR EL AVANCE DE LA REVOLUCION CIUDADANA, META DE LA DERECHA
A juicio del presidente de la república, Rafael Correa, para la derecha el punto esencial ya no es si ganaron las elecciones o no, pues saben y está corroborado que perdieron en justas impecables.
«Se trata por las buenas o por las malas, de impedir que siga la revolución ciudadana», aseguró recientemente a medios de comunicación desde Manabí, epicentro del terremoto del pasado 16 de abril de 2016 y severamente golpeada por la actual temporada invernal.
Y es que la continuidad del gobierno de Alianza PAIS, no solo es significativa para Ecuador, sino para América Latina, donde la derecha ha logrado recuperar espacios y, en ese sentido, el fracaso de la propuesta neoliberal en este país sudamericano puso fin a esa tendencia y garantizó la continuidad del progresismo en la región.
DESAFIOS DE LENÍN MORENO, EL PRESIDENTE DE TODOS LOS ECUATORIANOS
Desde el venidero 24 de mayo, Lenín Moreno se convertirá en el presidente número 44 de la República del Ecuador.
Los desafíos del nuevo gabinete pasan por incentivar la inversión y mantener el curso de la economía ya estabilizada y en crecimiento, tras una recesión motivada por la caída en los precios del petróleo, la apreciación del dólar y factores climáticos como el terremoto del pasado 16 de abril de 2016, cuyas pérdidas se valoraron en más de tres mil 300 millones de dólares.
El combate a la corrupción, ahondar en proyectos de seguridad social, generar más empleos y avanzar en las revoluciones en salud y educación, en marcha y con logros palpables; consolidar las relaciones con el resto del mundo y continuar el respaldo a la integración latinoamericana, son otras metas importantes.
De manera general, el objetivo central es trabajar por la armonía de los ecuatorianos, seguidores o no del partido de gobierno, en aras de un mejor país.